Cuchá, Cuchá

Entre tanta pavada, tanto macaneo sobre fulbo, el día de hoy es revelador. Es la jornada en que una noticia conmueve al mundillo futbolero. Un club italiano, el Inter para ser más precisos, contrató a un señor que sabe tanto de fulbo como yo o como cualquiera de nosotros que haya jugado, mirado o simpatizado con el juego. El señor en cuestión cobrará la escandalosa cifra de 9.000.000 de euros al año para hablar de lo que todos sabemos y supongo que los italianos también.El señor dirá que hará un 4-4-2, que al milésimo de rodar la pelota se convertirá en cualquier combinación de números que se les ocurra. Dirá que quiere un 9 de área o un 9 que se mueva en todo el frente de ataque y paro acá porque ya sabemos, la estupidez humana no tiene límites. La noticia, es una bofetada al sentido común, un puntapié alevoso al buen gusto y un codazo descalificador al juego en sí mismo . Nada podemos hacer desde aquí para evitar este despropósito, pero sí podemos, todos juntos, rezar los creyentes y hacer un esfuerzo mental extra, los demás, para que Inter salga último en el campeonato, que se vaya al descenso, que se corte la luz cuando juegue de noche, que crezca cicuta en el pasto de la cancha en su estadio y que a Mourinho, el charlatán de turno lo agarre el corralito de Duhalde y que le devuelvan la plata en 24 años y con bonos del estado argentino.

En Argentina no nos va mejor. En uno de esos programas en que los periodistas preguntan al entrevistado las preguntas más obvias para recibir respuestas envasadas, entrevistaban a Claudio Borghi, aclaro que lo defendí cuando era jugador y todo el mundo le caía encima por su religión, su modo de ser, y hasta su modo (hermoso) de jugar. Estaba con el volumen bajo así que alcancé a leer en el videograph, que Patito Rodriguez (sic) no estaba maduro para jugar. Como el comentario era jugoso, subí el volumen, justo para escuchar una sarta de estupideces dichas por un ex-jugador, devenido a charlatán futbolero, sobre la formación de un jugador que no juega pero que está en el banco de relevos, lo que supone que si no hay más remedio o si la hinchada se pone cargosa, entrará a jugar sin madurar. Ya que los periodistas no le aclararon a Borghi, Rodriguez es delantero y por suerte está sin madurar, entonces hará mas gambetas, correrá más, será en fin mas "desfachatado" más "sin verguenza" que los maduros que cuidan el puesto. Yo, que tengo algunos años y los periodistas que lo entrevistaban también, le cuento a Borghi que Maradona estaba para jugar el mundial de Argentina en 1978 y lo privó de ello otro charlatán como él.

Buenas Noches