Trémula luz en un atardecer de mayo

De la copa de Europa quedó claro que cuando no se sabe es al ñudo. Insisten en ponderar, algunos escribas e informadores, los sistemas defensivos y la imposiblidad de sortearlos y lo difícil que es jugar cuando enfrente hay un equipo cubriendo todo el frente de ataque, imaginesé usted 10 personas codo a codo, 5 en primera fila y 5 en segunda mas un arquero con los brazos abiertos tapando los 7 metros y pico de ancho. La imagen me remite a las películas de época cuando dos ejércitos, invasor y defensor se enfrentaban, se lanzaban flechas, bombas y finalmente luchaban mano a mano, unos por pasar otros por resistir. Por suerte en el fulbo, lo máximo que puede hacer el defensor es quitarle al atacante el útil que ambos usan para introducirlo en el arco contrario. Cuanto mas habilidad tenga el atacante para esconder el útil de las acechanzas adversarias, mas éxito tendrá en cumplir con la meta, para ello tiene movilidad vertical, juego al claro, gambeta, toques en pared, centros atrás para defensores a contrapie y algunas otras jugadas que tiendan al engaño, la sorpresa, la repentización. Claro que para eso hay que tener los jugadores y en el partido que nos ocupa los mejores, mas dispuestos y hábiles estaban, curiosamente del lado de los defensores. Milito a quien todos recordamos en el Racing Club de Argentina, debatiéndose ante defensores de estos lares, sólo tuvo que poner el cuerpo en un gol y anticipar en el otro, lo preocupante es que en el equipo supuestamente atacador el central es argentino y jugará el mundial para nosotros.

Aunque parezca mentira, el jugador francés de origen africano Alou Diarrá, no jugará el mundial de fulbo por problemas intestinales. No es precioso? tiene Diarrá? faltan aun 20 días pero ya se sabe que Diarra es proclive a pérdidas inoportunas y eventuales escapes por lo que Domenech tiene que reemplazarlo y para ello ha convocado al delantero Francois Tapon.

Por último ayer desgraciadamente para su hinchas y en especial para el negro Fontanarrosa, Rosario Central, se fué al descenso, merecidamente por otra parte. La imagen televisiva se quedaba largamente en la figura del mal llamado DT del equipo rosarino, interpretando la pena que sentía el señor (que se irá a otro club a medrar y a poner la misma cara si le va mal) o la responsabilidad del señor por el funcionamiento del equipo. Señores hinchas y espectadores, los futbolistas en el campo y en el vestuario son los responsables y el sistema usado para los descensos además.

Buenas tardes